(Antofagasta, 17 mayo 2022) Con la presentación del borrador de las 499 normas constitucionales aprobadas en Antofagasta se inició el trabajo de las comisiones de Preámbulo, Armonización y Normas Transitorias, marcando el tramo final de redacción del documento que se plebiscitará el próximo 4 de septiembre. En tanto, pese al simbolismo del acto en las ruinas de la fundición de plata Playa Blanca -conocida como Ruinas de Huanchaca- el sector empresarial minero se manifestó preocupado por lo sancionado y advierte un riesgo para la actividad productiva a futuro.
El acto público congregó a convencionales, autoridades locales y representantes de entidades gubernamentales, en lo que se calificó como “una fiesta cívica”. Durante los próximos días se abocarán a darle cuerpo y armonía a las 499 normas aprobadas, mientras se realizan actividades de difusión y socialización de la nueva Carta Magna.
Para el anfitrión, el rector de la Universidad Católica del Norte Rodrigo Alda, el evento “fue un hito importante para los que creemos que las regiones tienen un rol importante para el desarrollo del país”. Además, hizo propicio la ocasión para entregar una carta a la mesa directiva de la Convención con las inquietudes de las Universidades del G9 -entidades de propiedad privada que operan con fondos del Estado- señalando “no vemos con total claridad la cabida de nuestras instituciones dentro de la propuesta de carta magna, pero esperamos que en este periodo de armonización ojalá se pueda reconocer eso que, a mi juicio, es un error que puede costarle caro a la educación superior de nuestro país”.
Algunos convencionales manifestaron sus reflexiones: Fernando Atria, constituyente por el distrito 10 del Frente Amplio, dijo que “en general, la nueva Constitución es acerca de cambiar los términos de nuestra convivencia social, ese es el marco más grande. El Estado regional apunta a cambiar la relación entre el centro y las regiones, como una manera de los chilenos y chilenas que han estado viviendo este centralismo asfixiante, veamos que son nuevos términos de convivencia política y social. Esta idea de Estado regional es el centro de esta nueva Constitución”.
En tanto, el constituyente Cristián Monckeberg de Chile Vamos señaló del borrador que “se terminó un trabajo, pero a mi juicio este texto desaprovechó la gran oportunidad de interpretar a una gran mayoría. Acá se escribió una propuesta constitucional por una mayoría relativa”.
REACCIONES EN EL SECTOR MINERO
Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de Minería, manifestó que existen varias lecturas del borrador, precisando que entre las negativas o pesimistas está la falta de acuerdo en lo relacionado con el estatuto de los minerales y que generarán nuevas leyes, como “el código de minería que se convertiría en una ley de simple mayoría que agregará más incerteza jurídica que la existente en la actualidad”.
Indicó que si bien el texto respetó el hecho de mantener las sentencias judiciales firmes y ejecutoriadas, no pueden cambiarse, y entendemos que los derechos mineros tienen una base jurídica. “Esto significa que todos los derechos mineros vigentes permanecerán en el futuro”.
Acerca de la propuesta de nacionalización de los minerales -lo que fue rechazado por el pleno de la Convención- Hernández admitió que el escenario es “menos negativo: uno de los pilares del parque productivo que tenemos hoy día es por el Código de Minería y los derechos mineros otorgados por el poder judicial, pero de alguna manera queda entredicho. Lo aprobado en la Constitución no aumenta la seguridad jurídica para nosotros… quedamos en el aire. Respecto al impacto en las inversiones, esto significa que mientras que ésto no se aclare seguiremos en el limbo y nadie se atreverá a hacer grandes inversiones, salvo las de mantenimiento de las operaciones” subrayó el directivo.
La Cámara Minera de Chile, a través de su presidente, Manuel Viera, señaló que, si bien la sombra de la nacionalización de la minería se eliminó de los artículos transitorios propuestos por la comisión de Medio Ambiente de la Convención Constitucional, al igual que la que promovía la transición al nuevo régimen de concesión, hay que esperar el resultado final, incluyendo la forma y el fondo con que se pretende legislar.
“Nos llaman la atención muchos conceptos imprecisos, la gran cantidad de nuevas instituciones del Estado que se formarían para poder regular los llamados bienes naturales, podemos afirmar que como está quedando esta nueva carta magna “es un mal sistema jurídico para nuestra minería”, aseveró Viera.
Agregó que: “si bien, nos tranquiliza un poco el hecho de que se haya rechazado el famoso artículo 27 que hablaba de la nacionalización de la minería, existen otros aspectos que aún no dan tranquilidad ni certeza jurídica al sector. Además, como es sabido, si esta propuesta de Carta Magna, se aprueba, debemos esperar a ver cómo se va a legislar y las funciones de los nuevos organismos reguladores que se deben crear”, indicó.
Precisó, además, que es el momento de analizar, conversar y estudiar a fondo cada uno de los cambios. “Debemos estar alertas respecto a lo que finalmente se entregará para el plebiscito de salida, sin embargo, esto no termina ahí, ya que, si se aprueba, hay que seguir muy de cerca el camino que ésta tomará, especialmente frente a la redacción de las leyes que le darán forma y, que en definitiva, serán las reglas que regirán los destinos de nuestra querida minería”, dijo.
Publicada el 17 mayo 2022